Exponotas No. 43

El Consejo Gremial Nacional ha hecho un ejercicio de reflexión sobre el proceso de negociación con las FARC, cuyas conclusiones se puedan resumir en las siguientes consideraciones:

Con fundamento en los principios del Consejo Gremial Nacional, los empresarios de Colombia acogen la paz como un derecho y un deber de obligatorio cumplimiento, tal como lo establece la Constitución. Entienden la paz no como la usencia de conflictos sino como el discurrir de una sociedad que cuenta con los mecanismos institucionales para resolverlos.

  • El Consejo Gremial Nacional respalda las negociaciones para la terminación del conflicto. 
  • Esta es una negociación entre un Estado legítimo y un grupo armado al margen de la ley que se da por razones humanitarias, para evitar que haya más víctimas y daños a la sociedad, a la economía, a la infraestructura y a los bienes públicos. 
  • El acuerdo de paz tiene que ser respetuoso del Estado de Derecho. No se está negociando la creación de un nuevo orden político y social, la negociación debe transcurrir dentro de la Constitución, y no por fuera de sus preceptos.
  • El Derecho no es obstáculo para la conquista de la paz. Esta es el resultado de la plena realización de la Constitución y las leyes de Colombia, lo cual no impide que, preservando los valores que ellas plasman, sean reformadas para cumplir los compromisos resultantes de un eventual acuerdo.
  • Para el sector empresarial es fundamental que se cumpla con el compromiso de llevar a refrendación ciudadana los acuerdos alcanzados en la mesa de negociación.
  • Los acuerdos en materia de Desarrollo Rural Integral deben ser consistentes y consecuentes con el respeto a la propiedad privada, la garantía de la seguridad jurídica y la economía de mercado. El pleno desarrollo rural deberá consolidar agroindustria moderna con agricultura tradicional de pequeños y medianos propietarios.
  • El sector empresarial espera una mayor precisión sobre puntos no conocidos sobre la jurisdicción especial para la Paz.
  • El acuerdo sobre la reparación de las víctimas deberá asegurar que las FARC asuman su cuota de responsabilidad, tanto en la dimensión moral como en la económica.
  • La Comisión de la Verdad debe ser consistente con el hecho de que    Colombia cuenta con un Estado legítimo, sustentado en unas instituciones democráticas y republicanas, a diferencia de las desarrolladas en dictaduras o Estados totalitarios, o del régimen de “apartheid» en Sudáfrica.
  • De acuerdo con los postulados del Estado de Derecho, las responsabilidades por crímenes relacionadas con el conflicto serán   personales.
  • Es indispensable el cese efectivo de todas las actividades delictivas de la guerrilla, incluyendo terrorismo, minería ilegal, narcotráfico, secuestro, contrabando y extorsión, al igual que la entrega de bienes y recursos asociados a actividades ilegales.
  • Cualquier mecanismo que se implemente para la dejación de las armas, deberá asegurar que dicha entrega sea total y verificable.

JAVIER DÍAZ MOLINA

Presidente Ejecutivo

Analdex

 

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