El comercio exterior muestra cartas para crecer sus ventas
Las expectativas de los empresarios colombianos agrupados en la Asociación Nacional de Comercio Exterior (Analdex) para que el segundo semestre de 2020 sea positivo en materia de exportaciones y termine este año con una caída del 10 %, cifra mejor a las que proyecta la Organización Mundial de Comercio entre -13 % y -32 %, tuvieron un revés en julio, pues según las cifras de Departamento Administrativo Nacional de Estadística (Dane) durante ese mes las ventas al extranjero sumaron 2.548,9 millones de dólares, observando una disminución de 21,7 % en relación con julio de 2019 (ver Informe).
“Seguimos con signo negativo, pero en la medida que se reactiva la economía, las exportaciones empiezan a recuperarse. Tras la crisis económica ocasionada por la pandemia, hay renglones agrícolas que seguramente apoyarán el repunte en el 2021”, expresó Javier Díaz Molina, presidente de Analdex.
Para el dirigente, es necesario acelerar la diversificación de la canasta exportadora, y no cerrar más la economía ante eventuales rebrotes de la covid-19, dado el efecto adverso que las restricciones causan sobre las cadenas productiva y logística que frenan los procesos de exportación. “Hay que reactivar todo el aparato productivo y en medio de la emergencia, lo positivo, es que a diferencia de una guerra o un desastre natural, la infraestructura y las fábricas no se dañaron, siguen ahí, así que la tarea es volver a activar las máquinas y la cadena productiva, lo que podría ser un proceso mucho más rápido al no tener que arrancar de cero”.
Igualmente, mencionó que hay que aprovechar las oportunidades que hay en los mercados internacionales que se deben aprovechar, lo que requiere unas reglas de juego claras, estabilidad jurídica, incentivos al sector exportador, ayudas a las empresas para que se reactiven.
Opciones por explotar
La firma consultora en negocios internacionales Araujo Ibarra, por su parte, explicó que la recomposición en términos comerciales globales por cuenta de la guerra comercial, así como la pandemia de la covid-19 han demostrado ser augurios de un reordenamiento de la economía internacional.
Ese escenario que presenta una serie de retos significativos, como todo cambio, también ofrece oportunidades y Colombia se perfila como un jugador importante en la continuidad del libre comercio en las Américas.
En esa línea, Díaz expresó el martes en el congreso virtual de la Federación Colombiana de Transportadores de Carga y la Logística (Colfecar) que la pandemia trajo un rompimiento de las cadenas globales de valor y ahora lo que se fortalecen son las cadenas regionales y para aprovechar esa opción el país debe usar las herramientas de las que dispone como el Tratado de Libre Comercio con Estados Unidos, así como otros 17 acuerdos vigentes similares con socios comerciales.
Por su parte, la directora de la Cámara de Comercio Colombo Americana, María Claudia Lacouture, llamó la atención sobre el proceso de nearshoring que se viene dando desde hace dos años por la tensión comercial entre China y Estados Unidos y que se aceleró con los efectos que ha generado en el comercio la pandemia del covid-19.
Para explicar el nearshoring, Lacouture mencionó que“desde Estados Unidos, las empresas que tenían producción en China o Asia comenzaron a buscar opciones de proveeduría más cercana y eficiente y en esa medidas se fortalecen las cadenas regionales de valor. Por nuestra cercanía con Estados Unidos esta es una gran oportunidad para el país y permitirá aprovechar mejor el tratado de libre comercio e impulsar la diversificación de las exportaciones, pues buena parte de la inversión extranjera llega o se incrementa para operaciones de exportación”.
Desde esa perspectiva, el ministro de Comercio, José Manuel Restrepo, aseguró hace 20 días en un conversatorio con la directora de la Cámara de Comercio Colombo Americana que están tratando de identificar cuáles multinacionales, y de qué regiones, buscan una nueva organización de sus cadenas de suministro para fortalecer sus bases de proveeduría y acercarse a sus consumidores finales.
Para llegar a esa identificación se hizo una segmentación de cerca de 596 empresas, de las cuales se han contactado a 421 y, como resultado de un primer acercamiento, se encontró a 50 empresas con interés y potencial de relocalizarse en Colombia, 18 de ellas de Norteamérica, 14 de Asia, 12 de Europa y 6 de América Latina.
Industrias de Tecnologías de la Información y las Comunicaciones (TIC), metalmecánica, materiales de construcción, químicos, agroindustria y moda son los principales sectores de las compañías que estarían contemplando inversiones en Colombia, dentro del proceso de relocalización que se viene dando en el mundo en la nueva configuración del comercio internacional.
“Esto no significa que esas compañías se vayan a instalar ya en el país, puesto que, es un trabajo que aún estamos gestionando y la idea es seguir avanzando en esa dirección para aprovechar las oportunidades que se identifiquen”, aclaró Restrepo, quien añadió que esta estrategia está en línea con la invitación que le hizo Estados Unidos a Colombia para ser uno de los países piloto del plan Back to the Américas (De vuelta a las Américas).
Norte señalado
Con una ubicación geográfica privilegiada, una amplia red de acuerdos de libre comercio suscritos y un buen régimen de incentivos a la inversión, Araujo Ibarra estimó que Colombia podría ser una gran plataforma de producción, transformación y distribución de bienes y servicios en el mercado ampliado de las Américas, por lo que elaboró un mapa de oportunidades comerciales en mercados claves como China, Corea del Sur, España, Alemania, Italia, Reino Unido, Canadá y Estados Unidos, México y Brasil.
Un ejercicio similar tiene para Colombia el Centro de Comercio Internacional (ITC por su sigla en inglés), del cual extractamos 50 productos que aunque ya se venden en el extranjero aún tienen potencial de aumentar los negocios y los posibles mercados con espacio para comprar más.
Tomado de: El Colombiano